“ La Revolución se lleva en el corazón para morir por ella" (Original)
Palabras clave:
papel jugado, enfrentamiento, pandemia, estudiantesResumen
El presente trabajo trata sobre el papel jugado por la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) en el enfrentamiento a la pandemia del coronavirus en la modernidad cuando la humanidad enfrenta esta difícil situación epidémica en todo el mundo. El trabajo ofrece además diversos detalles sobre las acciones desarrolladas por la juventud como una forma de hacer conscientes a las personas sobre quedarse en casa para cuidar su salud, principalmente aquellas que son vulnerables, como: niños, embarazadas, ancianos, así como aquellas que padecen otras enfermedades. La investigación tiene como objetivo: valorar el papel jugado por los estudiantes en el enfrentamiento a la pandemia como símbolo de patriotismo, responsabilidad y compromiso con la Revolución y sus principios, así como con el Presidente de la República de Cuba: Miguel Díaz-Canel Bermúdez. Revierte importancia porque, no solo refleja la creatividad, el dinamismo y la valentía de los estudiantes en este período, sino la convicción de saber que la juventud cubana es seguidora de los ideales revolucionarios y que han mantenido el legado de los héroes en el transcurso de la historia. Los autores utilizaron los métodos teóricos: analítico-sintético e inducción-deducción, así como el análisis documental como método empírico.
En nuestro país a partir del diagnóstico positivo de los casos del pequeño microorganismo que ha paralizado el mundo, provocando la enfermedad más conocida como COVID 19 se tomaron medidas en el sector educacional por la rápida propagación del virus. Esta pandemia, que ha sido una de las más letales en la historia de la humanidad ha puesto al planeta tierra en alerta desde que se diagnosticó el primer caso en Wuhan, China a finales del año 2019 y que hasta la fecha es un acertijo que no encuentra soluciones para su definitiva desaparición.
En Cuba, a pesar de los esfuerzos de investigadores y el personal médico y sanitario, la pandemiadel Coronavirus cobró y sigue pasando facturas a vidas humanas por su rápida expansión a todo lo largo y ancho de la isla. Pero muchas también son las acciones llevadas a cabo por los cubanos para contrarrestar las muertes como lo es la creación de vacunas anti-Covid 19. Las Soberanas 01 y 02, así como la Plus, Abdala y Mambisa son un ejemplo fehaciente del desarrollo alcanzado por la Mayorde las Antillas para salvar a la población del contagio.
"Es la hora de gritar Revolución, es la hora de tomarnos de las manos, pues no habrá mejor promesa que cumplir con el deber y saber ser cada día más cubanos"
El pasado año 2020 transcurrió de una manera muy convulsa y ha influido en nuestro quehacer de una manera muy radical, pero a la vez, nos ha enseñado a amarnos a nosotros mismos y no dejar de creer en el mejoramiento humano.
La pandemia de la COVID-19, unida al recrudecimiento del injusto bloqueo genocida impuesto por el gobierno norteamericano hacia la Mayor de las Antillas, constituye hoy la principal fuente de crisis en nuestro país y en el mundo entero, eso sin nombrar el hambre que azota a gran parte de la población mundial, las guerras que año tras año apagan la vida de millones de seres humanos y animales, así como la contaminación ambiental provocada por la irresponsabilidad del mismo.
Somos testigos fehacientes de las luchas estudiantiles en las calles de muchos países, protagonizadas por jóvenes iguales que nosotros, prestos a alzar su voz para hacer valer sus derechos como personas de bien, y también de algunos que no ven el amanecer porque su sonrisa es silenciada por el estrepitoso sonido de la represión y las balas.
Cuando me replanteo todas estas aristas y las contrapongo ante mi pensamiento fidelista, marxista, leninista y martiano, solo logro visualizar que el camino más viable para conducirnos a un Mundo Mejor es no rendirnos ante las más crudas eventualidades.
En estos tiempos convulsos los jóvenes universitarios nos cuestionamos y nos trazamos varias aristas para llegar a soluciones más viables que nos conduzcan a un mundo mejor en las que la Federación Estudiantil Universitaria juega un papel importante ante el enfrentamiento al nuevo coronavirus. Los estudiantes de las Ciencias Médicas, esos ángeles, que sin alas en sus espaldas nos hicieron volar y correr afanosos por la historia, las ciencias, la política; en fin, por ese mundo de conocimientos infinitos y sueños que hoy hacen una realidad. Y parafraseando palabras de nuestro universitario mayor Fidel Castro Ruz, en las que estipulaba que en la juventud depositaba toda la confianza concebimos hoy, más que nunca nuestro compromiso, patentizado en cumplir con la misión de formarnos y superarnos por encima de lo conocido, sin miedo al fracaso y a la zozobra. Estos tiempos serán recordados por toda la historia, porque la juventud está marcando pautas importantes en el mundo de hoy. Ese mundo que nos conducirá hacia nuevos desafíos, nos mostrará nuevas metas, pero indudablemente nos conducirá por el camino correcto.
No hay mejor ejemplo de la capacidad para crecernos ante las dificultades que el compromiso con el que estudiantes de todo el país hemos asumido la lucha contra la pandemia del nuevo coronavirus, esa que ha mermado considerablemente a la población mundial.
Los universitarios apoyamos las tareas precisadas por el país en tiempos de pandemia como dignos continuadores de nuestros predecesores Julio Antonio Mella, Rubén Martínez Villena. José Antonio Echeverría y el Comandante en Jefe. El esfuerzo de la juventud en esta batalla fue, es y seguirá siendo admirable, pues así se pudo ver cuando los estudiantes respondimos al llamado de la Revolución que con mucha entrega y responsabilidad supimos llevar adelante tareas que nunca antes habíamos realizado.
Ante el llamado de la dirección del país a aprovechar las potencialidades del sector estudiantil en la cruzada contra la epidemia, se sumaron paulatinamente jóvenes de forma voluntaria, sin retribuciones económicas, y con la convicción de aportar en lo que sea necesario, como mensajeros y voluntarios en zonas rojas, en la entrega, compra y expendio de productos de primera necesidad a personas vulnerables en el Servicio de Atención a la Familia, así como en centros de aislamientos. Los médicos y
enfermeros en formación se internaron como refuerzo en terapias intensivas, hospitales pediátricos y asintomáticos con el COVID-19.
Las pesquisas diarias, el papel de todos aquellos jóvenes apoyando a todo ese ejército de las batas blancas, nuestro apoyo incondicional al presidente Miguel Díaz - Canel Bermúdez cuando pone en vigencia el pensamiento del Comandante en Jefe al pronunciar que sobre la juventud cubana se pueden depositar grandes tareas, que la principal de ellas en el día de hoy es la producción de alimentos, también los jóvenes nos sumamos a esa gran labor aportando nuestro granito de arena en los trabajos en polos productivos, huertos, organopónico y surcos para apoyar con la economía de nuestro país.
Muchos otros demostraron el amor a su Patria mediante las donaciones de sangre, las que deberían realizar todas las personas que cuenten con las condiciones físico-biológicas, pues así se pueden salvar vidas. Las donaciones no solo se usan para transfusiones, también se emplean en la fabricación de medicamentos como es el caso del Interferón el cuál ha sido de mucha utilidad para los pacientes positivos a la actual pandemia COVID19.
Otros apoyaron no solo en labores en el contexto actual de pandemia, sino también ayudando en la prevención y el control del dengue, impartiendo charlas educativas exclusivamente sobre las medidas eficaces de lucha contra el vector transmisor de la fiebre amarilla, el zika, el propio dengue y el chicungunya, ese que hoy en día nos está afectando. Apoyando de esta manera con el saneamiento ambiental a costas, litorales y playas, limpieza e higienización en instituciones claves para el desarrollo económico, honrando así de esta manera el legado de los abnegados jóvenes que nos antecedieron, a cuyos nombres respondemos con un enérgico PRESENTE, y sin cuyo sacrificio no formaríamos hoy parte de la organización más longeva de Cuba: La Federación Estudiantil Universitaria. Además, podemos agregar a todo esto sobre los acontecimientos relacionados con el Movimiento llamado de San Isidro, cuyas acciones tienen carácter antisocial, de irrespeto y provocación hacia el gobierno cubano. Ante hechos de esta índole siempre se levantarán quienes no estén dispuestos a negociar el socialismo, porque la juventud cubana respalda el diálogo sincero y respetuoso, pero siempre dentro y con la Revolución.
Al presentarse esta situación en el país de igual manera los jóvenes han aportado y lo han hecho de manera oportuna, fresca y creativa, y si pudiéramos catalogarlo en términos deportivos podemos decir que la juventud esta entrenada en estas tareas.
Otros prefirieron llevar a las comunidades el arte universitario educativo, respetando siempre las restricciones y las medidas de distanciamiento social para hacerles llegar a toda la población del porque es necesario cuidarse y tomar todas las medidas.
Cuando seamos capaces de fusionar en un todo lo que aprendemos día a día en nuestra brigada, facultad o filial, o en nuestro campus seremos capaces de entender que nuestra ALMA MATER nos observa y nos hace sus hijos.
Es de reconocer el trabajo de los jóvenes en los centros de la ciencia. Es emocionante ver la actitud de los jóvenes que forman parte de las brigadas médicas que brindan solidaridad y asistencia en el extranjero. Sería bueno que se escuchara ese reclamo por el Premio Nobel como luchadores por la vida y han representado a la Patria y la Revolución en estos espacios. La juventud está dispuesta y acorde a los principios de todos los años de la Revolución y dispuesta a asumir todos los retos presentes y futuros, y la motivación esencial es que lo hacemos por Cuba, la revolución, la familia y nuestros vecinos.
Convirtamos nuestra organización vanguardista en el campo de batalla más fiel de nuestras ideas. Seamos los más tenaces transformadores de un futuro mejor y de convicciones profundas en nuestro andar por la vida. Emprendamos acciones encaminadas a hacer que nuestra federación de estudiantes universitarios sea más creativa, más alegre, más dinámica. Enaltezcamos el papel de los universitarios cubanos, dignos herederos de la historia de nuestra Patria, en la continuidad de la Revolución y el perfeccionamiento del Socialismo, como único sistema posible en Cuba.
Mi ejemplo propio, como formador de las nuevas generaciones y en nombre de todos los jóvenes universitarios, me comprometo a llevar adelante lo aprendido en esta etapa y cumplir con mi deber, que ante las situaciones por las que transite mi país siempre estaré ahí, para dar el paso al frente como bien lo hicimos muchos de nosotros en esta etapa.
Vivimos una nueva época en la Historia de Cuba, época que, aunque dura, es un momento para nunca olvidar porque se demostraron valores, principios, pusimos bien en alto el nombre de nuestra organización, ya que los jóvenes, fuimos y seguiremos siendo los protagonistas de todo momento histórico. Tenemos historias para contar a todos aquellos que, como nosotros, un día tomarán las riendas de todo este pueblo abnegado, seamos una república Con todos y para el bien de todos, como dijera nuestro Apóstol en sus tiempos.
Y nos queda esa satisfacción que no hay nada más lindo que ver el rostro sonriente de todo un pueblo agradecido de tener una juventud como la nuestra.