Recibido: 13/02/2024   Aceptado: 25/06/2024

 

Efecto de la migración en las condiciones socio-económicas de la zona norte de la provincia Los Ríos, Ecuador (Original)

 

Effect of migration on the socio-economic conditions of the northern area of Los Ríos province, Ecuador (Original)

 

 

Mario Pérez Arévalo. Economista. Máster en   Desarrollo Económico y Políticas Públicas. Universidad Técnica Estatal de Quevedo. Los Ríos. Ecuador.

[ mperez@uteq.edu.ec ] [ https://orcid.org/0000-0002-3933-4695 ]

 

León Arguello Núñez. Economista. Máster en Gestión y Promoción del Desarrollo Local. Universidad Técnica Estatal de Quevedo. Los Ríos. Ecuador.

[ larguello@uteq.edu.ec ] [ https://orcid.org/0000-0002-2472-5570 ]

 

Mireya Patricia Flores Jaén. Economista. Magister en costos y administración financiera. Universidad Técnica Estatal de Quevedo. Los Ríos. Ecuador.

[ mfloresj@uteq.edu.ec ] [ https://orcid.org/0000-0002-6619-7630 ]

 

Resumen

La migración ha sido una práctica realizada por el ser humano, desde el inicio de su vida en comunidad, para asegurar su existencia, mediante la búsqueda de alimentos y medios que le permitan sobrevivir. De ahí que, en el presente trabajo, se proponga como objetivo evaluar el efecto de la migración en las condiciones socio-económicas del norte de la provincia Los Ríos, Ecuador. El examen se realizó en áreas consideradas rurales de la referida zona, mediante un estudio no experimental con exploración cuantitativa y la utilización del método de la investigación empírica que se basa en la observación mediante encuestas. Como resultados se obtuvo que, en los hogares encuestados,  los 27 años, en el caso de mujeres, y los 28, en los hombres, es la edad donde se emigra con mayor frecuencia; de los emigrantes encuestados, el 71.6 % se encuentra en rango de edad de 28-65 años, el grueso de emigrantes tenían un nivel de secundaria o educación media completa cuando salió, siendo el 47% de los 320 registrados; el 67.8 % se encontraba trabajando pero se ha visto en la necesidad de emigrar por inconformidad con sus salarios o insatisfacción con la actividad laboral. Por lo que se concluye que la calidad de vida en el sector rural en Ecuador es de un nivel bastante bajo, presenta muchas necesidades materiales que acarrean problemas como la salud y educación, e incluso sociológicos, al ser  en cierta forma invisibilizado cuando se trata de participar en algún conglomerado social en su propia comunidad.

Palabras clave: actividad laboral, bajos salarios, calidad de vida, emigración, necesidades materiales, inconformidad.

Abstract

Migration has been a practice that human beings, from the beginning of their life in a community, have carried out to ensure their existence, through the search for food and means that allow them to survive. Hence, we set ourselves the following objective: to evaluate the effect of migration on the socio-economic conditions of the northern area of the province of Los Ríos, Ecuador. The research was carried out in areas considered rural in the northern area of the province of Los Ríos, Ecuador; a non-experimental study was carried out with quantitative research using the empirical research method that is based on observation through surveys. As results, it was obtained that in the households surveyed from 27 in the case of women and 28 for men, it is the age at which emigration occurs most frequently; in the case of the emigrants surveyed, 71.6% are in the age range of 28-65 years old, the bulk of emigrants had a level of secondary or completed secondary education when they left, being 47% of the 320 registered, 67.8% were working but have seen the need to emigrate due to disagreement in their salaries or dissatisfied with work activity. Therefore, it is concluded that the quality of life in the rural sector in Ecuador is quite low. With many material needs that then lead to problems such as health and education, and even sociological problems as they are somehow made invisible when it comes to participating in a social conglomerate such as their own community.

Keywords: work activity, low wages, quality of life, emigration, material needs, discontent

Introducción  

Hasta comienzos del siglo XXI, Ecuador era fundamentalmente uno de los países donde se originaba la mano de obra para países como EUA y España. En los últimos 15 años, el patrón migratorio ha cambiado. En la actualidad es receptor de connacionales retornados; destino de emigrantes y refugiados, sobre todo del llamado sur global, región de tránsito utilizada por migrantes regionales, continentales y extracontinentales para llegar hasta EUA u otros países (Sotomayor-León et al., 2019). En este contexto, en 2008 el gobierno de la  Revolución Ciudadana adoptó una nueva constitución que promulga, entre otros principios, los de  libre movilidad y ciudadanía universal. Para algunos autores, este giro marcó una tendencia vanguardista en materia migratoria y una ruptura con el pasado nacional y con las restrictivas tendencias globales intensificadas en el contexto posterior al 9/11 (Ramírez, 2021).

Actualmente, el Ecuador vive un nuevo auge de flujo migratorio; esta dinámica no se puede entender sin considerar la historia migratoria del país, por lo general forzada, es decir, ocasionada por las dinámicas de acumulación del sistema capitalista mundial, desarrollo desigual y proceso de neoliberalización que destruyen los modelos nacionales de desarrollo, desarticulan las dinámicas de valorización y desconectan a amplios contingentes poblacionales de sus medios de producción y subsistencia, generando una amplia sobrepoblación que tiene la necesidad de abandonar su lugar de origen en la búsqueda de la subsistencia, particularmente en los países que están interesados en explotar abundante fuerza de trabajo barata, flexible, desorganizada e irregular. En esta línea, coloca tres elementos para reflexionar sobre las migraciones, las cuales sirven para atemperarse sobre lo que ha pasado en varios países de América Latina: pobreza neoliberal, violencia sistémica e impunidad institucional. Estos elementos no solo generan exclusión, sino un hartazgo generalizado y desilusión permanente (Ramírez, 2020).

En el caso específico de la zona en estudio, el norte de la provincia de los Ríos constituido por cinco cantones (Buena Fe, Mocache, Valencia, Quevedo, Quinsaloma) con mayoría de población urbana, posee una distribución demográfica 65 % urbana y 35 % rural. Un aspecto a destacar en la migración de esta zona es el nivel de pobreza por Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI). Si se tienen en cuenta dos de los cantones que presentan los porcentajes inferiores Quevedo 67,7% NBI y superior para 90,3%, se determina de alguna manera la calidad de vida de sus habitantes. En el sector rural que, como indica la teoría, ha sido el menos favorecido por el crecimiento y desarrollo económico, se registran altos niveles de pobreza llegando casi al 100 % NBI, lo que constituye una de las razones para que los pobladores rurales decidan salir a otros lugares a obtener mayores ingresos y mejorar sus condiciones socio-económicas (Mendoza-Vargas et al., 2021).

Otra dificultad que se presenta es la alta concentración de la tierra cultivable en manos de empresas agrícolas que se dedican generalmente a la exportación, mientras que el 60 % de la Agricultura Familiar Campesina (AFC) se dedica a la producción de alimentos para el consumo interno, de ahí los bajos ingresos que obtiene (FAO, 2023). Lo anterior permite afirmar que, por las precarias condiciones de vida, consecuencia de esos niveles de pobreza por NBI, la gente se tiene que movilizar por razones de supervivencia, convirtiéndose en una acción humana y no en fenómeno, como se le reconoce a la migración, de acuerdo con lo afirmado por Mata et al. (2021) y Nivela et al. (2024).

Para enfrentar estas altas y preocupantes cifras, el Gobierno y Asamblea Nacional han elaborado algunas leyes y han reformado otras, como las siguientes: Ley de Tierras, Ley de Agro-Biodiversidad y Semillas, Ley de Comunas, Ley de Territorios, Ley de Desarrollo Agrario, Ley de Agroindustria y Empleo Rural; Ley de Sanidad Animal y Vegetal, así como la Ley de Acceso de los Campesinos e Indígenas al Crédito Público. Como se puede apreciar, existe una cantidad de normativas de carácter multidisciplinario para el estudio migratorio, como lo manifiestan Parada-Gutiérrez y Veloz-Cordero (2021). Sin embargo, no han contribuido eficazmente a erradicar esta situación en las áreas rurales. De ahí que se plantee como objetivo: evaluar el efecto de la migración en las condiciones socio-económicas de la zona norte de la provincia Los Ríos, Ecuador

Materiales y métodos

La investigación se realizó en áreas consideradas rurales de la zona norte de la provincia  Los Ríos, Ecuador. Los territorios geográficos que componen esta zona son los que se ubican alrededor de los siguientes cantones: Buena Fe, Mocache, Quevedo, Quinsaloma y Valencia. Dentro de ellos se encuentran los sectores rurales amanzanados, denominados parroquias rurales, como se muestra a continuación.

     Tabla 1. Población y densidad por cantones de la provincia Los Ríos, y del Ecuador

DENOMINACIÓN

Población total

Población

rural

Densidad Poblacional

Hab./ Km²

ZONA NORTE

334.147

115 473

185,29

PROVINCIA DE LOS RÍOS

778.115

233 343

139,12

PAÍS

14 483 499

5 344 411

56,49

Fuente: elaboración propia.     

Para el establecimiento de la población y muestra (tabla 1), se consideraron los datos del INEC (2022) en cuanto a las migraciones internacionales y nacionales de los cantones que conforman la zona norte de la provincia. Estos datos sirvieron para fijar el número de encuestas a realizar a la población rural y por cantones: Quevedo, Buena Fe, Valencia, Mocache y Quinsaloma.

El universo de emigrantes se convirtió en universo de hogares para poder obtener la muestra. Se consideró que cada familia de emigrantes tiene al menos 1,4 miembros que han salido (Martínez, 2004), se identificó un total de 13530 emigrantes y el número de miembros emigrantes por hogar, para un total de 9.664 hogares, que es el universo a utilizar.

La muestra de carácter probabilística se realizó utilizando la fórmula para poblaciones finitas que se indica a continuación:

Donde:

N= universo, para este caso es de 9.664 hogares.

Z= valor estándar con un grado de confiabilidad de 90% para esta muestra

q= probabilidad de la población que no presente las mismas características; para el presente caso es 0,7.    p= q - 1

e= margen de error para la muestra, en esta ocasión es del 5%.

Reemplazando los valores, se obtuvo una muestra mínima entre nacionales e internacionales de n= 221 (tabla 2).

Tabla 2. Proporción de hogares de migrantes según la muestra obtenida

Total migrantes

13.530

Migrantes por hogar (Martínez, 2004)

1,4

Total hogares de migrantes

9.664

Muestra obtenida a encuestar

221

63%  migrantes nacionales

139

37% migrantes internacionales

82

            Fuente: elaboración propia.     

Para definir el número de encuestas por cantones y por tipo de emigración, se tomó las proporcionalidades por tipo de migración, nacional e internacional. Para las proporciones por cantón se logró definir el número de encuestas que se debían realizar en cada uno de ellos, pero se realizaron 29 adicionales, es decir, 250 encuestas. De acuerdo con la disponibilidad del INEC (2022), la información no especificaba lo rural y urbano, por lo que se decidió elaborar más encuestas en los cantones que tienen mayor población rural que urbana y menos en las que tienen mayor urbana que rural (tabla 3).

Tabla 3. Distribución de las encuestas por cantones y parroquias de la zona norte de la provincia Los Ríos, Ecuador

CANTÓN

Hogares encuestados

Porcentaje

Buena Fe (Buena Fe)

37

14,8

Patricia Pilar (Buena Fe)

46

18,4

La Esperanza (Quevedo)

27

10,8

San Carlos (Quevedo)

37

14,8

Mocache

34

13,6

Quinsaloma

24

9,6

Valencia

45

18

Total

250

100

Fuente: elaboración propia.     

Se realizó un estudio no experimental con investigación cuantitativa mediante la utilización del método de la investigación empírica que se basa en la observación mediante encuestas, las cuales fueron aplicadas siguiendo como criterio de inclusión las personas que cumplían el requisito de tener una edad de 25 años en adelante, porque las preguntas estaban en torno a un período de diez años atrás; además,  que dentro de sus hogares hubiesen personas que han emigrado a otros sitios dentro o fuera del país, por lo que se utilizó un muestreo probabilístico estratificado proporcionado (Pérez, 2005, p.149), de acuerdo con los datos del INEC (2022) sobre los emigrantes internacionales e internos de la provincia, a nivel de cantones.

 Estas se aplicaron en cuatro semanas, con la colaboración de funcionarios del Gobierno Autónomo Descentralizado de Los Ríos. Además, para poder cubrir el territorio de estudio, se contó también con la colaboración de estudiantes y egresados de la carrera de Economía, de la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad Técnica Estatal de Quevedo, quienes fueron capacitados para el manejo del cuestionario, y monitoreados de tal forma que la información recogida fuese veraz y los informantes,  los más adecuados.

El cuestionario de la encuesta se diseñó con el fin de realizar una descripción del fenómeno migratorio y su influencia en las condiciones de vida de las familias en el sector rural, considerando las teorías que tratan este tema. Este instrumento de investigación contiene 5 secciones: la primera (Sección A) presenta detalles sobre la ubicación geográfica, dirección y características de la vivienda; la segunda tiene dos puntos, en la Sección B1 se identifica a las personas que habitan de manera permanente y su relación con el jefe o jefa de hogar; y en la Sección B2 se define la identificación de los emigrantes de los hogares rurales encuestados.

Una vez obtenida la información, se sometió a un control de calidad mediante la revisión de coherencias en las respuestas y a través de verificación con segundas visitas, así como por medio de llamadas telefónicas a los números de móvil que fueron proporcionados por los informantes. Luego de la verificación, se procedió a tabularla en el programa SPSS versión 22, categorizando a las encuestas que contenían emigrantes internacionales y nacionales por cada uno de los cinco cantones, para proseguir con el análisis de los resultados que a continuación se presentan.

Análisis y discusión de los resultados

Para poder entender los detalles de los resultados de las encuestas hay que considerar que, desde el año 1999 con el comienzo de la crisis financiera, luego de los efectos perjudiciales del fenómeno El Niño, de 1998 (Cardoso-Ruiz y Gives-Fernández, 2021), y de la dolarización en el año 2000, estos eventos contribuyeron al éxodo masivo hacia Europa, principalmente a España, con tendencia a la baja migratoria desde 2002 en adelante, ya que en 2004 se implementa la obtención de visa para ecuatorianos que quieran ingresar al espacio Schengen. Una de las razones, adicional a la exógena de la crisis, y que sin duda fue producto de esta, fue la incertidumbre de lo que pasaría en el futuro si se hubiesen quedado en el país, de acuerdo con Ramírez et al. (2019), quienes precisamente mencionan que la incertidumbre es una causa de las migraciones actuales.

      Ecuador tiene un comportamiento migratorio más o menos constante y bajo, sin ser un país de emigrantes como México, cuya frontera con Estados Unidos es la más transitada del mundo por la migración (Ramírez-Gallegos y Umpierrez-de Reguero, 2019). Pero en los citados años de crisis, la desesperación, desesperanza e incertidumbre de la gente hizo que muchos tomasen la decisión de emigrar, aunque luego se produjo un descenso pero sin llegar a los niveles de antes de la crisis (Alarcón et al., 2019).

En cuanto a las migraciones internas, la provincia Los Ríos es la quinta de entre las 24 del país que más emigrantes internos registra desde 1990. Las provincias a donde se dirigen son Guayas, Pichincha, Manabí, y para 2010, hacia la nueva provincia de Santo Domingo de los Tsáchilas, que formaba parte de la provincia Pichincha hasta 2007. De acuerdo con la información del INEC (2022) y con la variable ¿dónde vivía hace 5 años?, la migración en sentido contrario, considerando los cantones de la zona norte, salvo Quinsaloma, viene desde las mismas provincias, como se observa en la tabla 4.

Tabla 4. Migración interna desde otras provincias a los cantones de la zona norte de la provincia  Los Ríos, Ecuador

Cantón de llegada a

 la zona norte

Provincia de Procedencia

de la mayoría de inmigrantes de 2005 a 2022

Buena Fe

Guayas

Manabí

Pichincha

Mocache

Guayas

Manabí

Esmeraldas

Quevedo

Guayas

Manabí

Pichincha

Quinsaloma

Bolívar

Guayas

Cotopaxi

Valencia

Manabí

Guayas

Pichincha

Fuente: elaboración propia.

Por los detalles de la ubicación geográfica de las viviendas a encuestar, las que se encuentran en zonas rurales del lugar donde se realizó la encuesta, ubicación exacta de la parroquia y cantón al que correspondía, fue importante incluir sitios de referencia, por ser la mayoría de las visitas en zonas de campo y viviendas dispersas, por lo que no se disponía de una dirección domiciliaria numerada, solo el nombre del recinto o comunidad y número de kilómetro que correspondía a la casa junto a la vía que conectaba de un recinto u otro. Además de   contar con la identificación del jefe/a de hogar para poder relacionarlo con el informante y también se registra la descripción de la vivienda encuestada con lo que se comprueba el tipo de casa en la que habitan, es decir, los materiales con los que ha sido construida y que a simple vista se puede determinar.

Lo aspectos anteriores ayudaron a que los 250 hogares rurales con emigrantes encuestados en los cinco cantones, arrojaron los siguientes resultados en cuanto a los habitantes de las viviendas visitadas. En cuanto al género, en las familias consultadas se encontraron 806 personas que habitan las 250 viviendas y que están proporcionalmente repartidas entre género masculino y femenino, casi en partes iguales, con ligera ventaja de mujeres (50.4 %) sobre los hombres (49.6 %).

La composición de los hogares encuestados, según relación con el jefe de hogar es la siguiente: el 31,1% de las 806 personas es la cabeza de familia, 16,4% es pareja del jefe o jefa de hogar, lo que significa que un poco más de la mitad de los hogares cuentan con padre y madre viviendo en el hogar, ya que, si el 31.1% corresponde a los 250 hogares visitados, el 16,4% representa el 52,7% de ellos.  Como es de suponer, el número de hijos o hijas del jefe del hogar corresponde a la mayor cantidad de observaciones (37,7%). Otro grupo que indica de alguna manera las dificultades para que los hijos con hogar se independicen es el 7,1% de nietos que habitan en el mismo hogar, también hay padre o madre del jefe y/o conyugue viviendo en el hogar, correspondiendo a un 2,9%, valores menores corresponden a otros parientes, hermanos y no parientes (figura 1).

El núcleo familiar o familia nuclear que está constituido por padre, madre e hijos, se encontró en el 52,7% de hogares rurales y el 47,3% restante tienen solo padre, madre, o abuelos/as como jefe de hogar. Estas familias tienen una estructura distinta, están padres o madres solas a cargo de sus hijos, o hijos a cargo de abuelos, tíos o hermanos mayores ya que, en algunos casos, sus padres han migrado, sobre todo al exterior. Esta circunstancia, podría generar familias disfuncionales, es decir, las que tienen relaciones familiares deterioradas por la violencia, abusos, machismo y falta de seguridad, lo que afecta el desarrollo de los niños –por ejemplo en su autoestima y rendimiento escolar (Jiménez, 2020) y, por ende, de la familia y sociedad en general (Cardoso-Ruiz y Gives-Fernández, 2021).

Figura 1. Parentesco con el jefe/a de la casa de los hogares rurales de la zona norte de la provincia Los Ríos, Ecuador

 

 

 

 

 

 

 

Fuente: elaboración propia

Las edades de los que habitan en estos hogares fluctúan entre 1 y 88 años, los grupos que se han establecido se basan en lo que para el Ecuador el INEC (2022) considera edad laboral, que está instituida de 15 años en adelante; el primer grupo está desde el 1 a los 14 años y el segundo, de 15 a los 27 años; según el INEC (2022),  desde los 27 en el caso de mujeres y 28 en el de los hombres, es la edad donde se emigra con mayor frecuencia. El tercer grupo está desde los 28 años a los 65, edades consideradas para la jubilación; y el último grupo, denominados de la tercera edad, va desde los 66 a los 88 años, esta es la mayor edad encontrada en los habitantes de los hogares .

Una gran parte de la población rural de los que viven en las casas visitadas es joven, llegando al 44% (18% niños y 26% adolescentes y jóvenes). Los que están dentro de la población con edad de trabajar, es decir, de 15 años y más son el 82%. Estas cifras son coincidentes con la pirámide poblacional del país, donde el grueso de la población comprende las edades desde 0 a 27 años y con los de la Población Económicamente Activa (PEA), considerando a los de 15 años en adelante. Si bien es cierto que de los 28 a 65 años se encuentra el 47%, cabe anotar que de ese porcentaje, el 62% va de 28 a 50 años (que son los que generalmente emigran) y son 238 individuos, mientras que 144, es decir, el 38% de ese 47% se encuentra en edades de 51 a 65 años, que a su vez son los que en menor cantidad emigran (Velasco et al., 2019).

Los niveles de instrucción que tienen los habitantes rurales en Ecuador siempre se han caracterizado por ser bajos, siendo esta una de las causas de la preservación de condiciones de pobreza tanto de consumo y, de manera más notable, de Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI). Esta situación se hace visible en los hogares rurales de la zona norte de la provincia (Figura 2).

De las 806 informaciones, 37 resultaron datos perdidos del sistema por respuestas no registradas, el 4,6%, por lo que el análisis se aplica a 769 personas. De ellos, el 40,1% no ha llegado a la secundaria o educación media, y dentro de ese porcentaje, el 2,8% de analfabetismo, que es bajo con respecto al resto del país; sin embargo, es preocupante al estar en el siglo XXI, en el cual se debería trabajar para solucionar el analfabetismo digital que en 2010 fue de 9,4% (Plan de Desarrollo y Ordenamiento Territorial 2015/2019).  Una de las causas principales, a decir del Ministerio de Educación (2015), es la situación económica de pobreza en la que se desenvuelven los hogares en el país y, sobre todo, los del sector rural.

Figura 2. Niveles de educación habitantes de los hogares rurales de la zona norte de la provincia de Los Ríos, Ecuador

Fuente: elaboración propia   

El capital humano es un factor importante para que una comunidad pueda desarrollarse y que este desarrollo surja de las propias comunidades, lo que se conoce como desarrollo endógeno por la participación de organizaciones públicas, privadas y de la sociedad civil (Vázquez, 2005). La educación como la transmisión de conocimientos es parte de ese capital humano porque potencia habilidades y destrezas que permiten incrementar la productividad y generar innovaciones, competitividad y crecimiento económico en sus zonas de residencia (Freitez, 2019), lo que no se lograría según los resultados obtenidos sobre la escolaridad de la población rural de Los Ríos.

De las 250 encuestas realizadas a los hogares con miembros migrantes, se encontraron que 320 personas habían salido de sus hogares para ir a vivir a otros sitios en el exterior o dentro del país. Como se mencionó anteriormente, el requisito para encuestar las viviendas en los sectores rurales de los cinco cantones de la zona norte de Los Ríos fue que tenía que haber uno o más migrantes y se encontraron en los 250 hogares 320 emigrantes, esto es un aproximado de 1,3 emigrantes por vivienda encuestada. Los resultados se muestran en el siguiente gráfico:

Figura 3. Parentesco del emigrante con el jefe de hogar rural de la zona norte de la provincia  Los Ríos, Ecuador

 

                        

 

 

 

 

 

Fuente: elaboración propia   

Como era de esperar, los hijos que son los más jóvenes y en edad productiva se encuentran en mayor número (184 personas), que representa más de la mitad, llegando al 57,5%. Entre ellos están estudiantes, hijos que se han casado y que se han ido por trabajo. Así mismo, otro grupo de personas que también se encuentra como emigrantes, son los hermanos del jefe o jefa de hogar. Estos representan el 15,3% y también en edades productivas como se verá más adelante. Un número de personas relativamente pequeño (35), es decir, 10,9% de los 320 emigrantes son los cónyuges, lo que indica que no son muchos los hogares que se han quedado incompletos por la emigración

Los padres emigrantes tan solo son el 2,8%; ello demuestra que, en estos hogares, al menos está el padre o la madre junto a sus hijos y no los han abandonado por emigrar. Los que constan como jefe/a (1,3%) son aquellos emigrantes que han regresado poco tiempo antes de la realización de la encuesta, de esta manera se justifica que el mismo emigrante sea también el jefe o jefa de hogar. En este espacio es preciso comentar las consecuencias negativas sobre las familias y específicamente en los niños y jóvenes cuando los que emigran son los padres y, sobre todo, las madres. En Cochabamba-Bolivia se ha hecho un estudio en el que se demuestra que la emigración del cónyuge afecta la relación de pareja y el comportamiento de sus hijos, los cuales mayoritariamente se muestran rebeldes y con bajo rendimiento en sus estudios, lo que acarrea otros graves problemas sociales (Camargo-Hernández et al., 2019).

Las personas que han salido del sector rural hacia el urbano dentro del país suelen ser en su mayoría las mujeres y cuando van de lo rural a lo rural es lo contrario, es decir, son minoría. En los hogares consultados, los que más han salido son los hombres (52,8 %) , mientras que las mujeres (47,2/), tanto a las ciudades como al exterior. En este caso no se considera el destino porque se hará más adelante. De los 320 emigrantes se aprecia una mayor cantidad de hombres que han salido de los hogares rurales. De lo anterior se infiere que ha existido una emigración mayoritaria de lo rural a lo rural, según lo manifestado por la UNESCO, pero esto no coincide con la mayoría de las preferencias de los emigrantes hombres, quienes se han desplazado a las ciudades de Guayaquil y Quito, al interior de Ecuador.

Como se esperaba, las respuestas que dieron los encuestados se ajustan a las distintas posiciones teóricas sobre la migración, esto es porque son los jóvenes los que mayormente emigran por las condiciones físicas para rendir frente al trabajo. En la figura 4 y tabla 5 que se presentan a continuación se verifica lo expuesto.

Figura 4. Edad de emigrantes en los hogares rurales de la zona norte de la provincia  Los Ríos, Ecuador

Fuente: elaboración propia   

A los emigrantes rurales de esta parte de la provincia se los ha dividido en grupos de edad, manteniendo el criterio de los que viven aún en los hogares que se revisó anteriormente en la Sección B1. Se consideraron  a los que van de 0 a 15 años que no llegan al 1%, es decir, que pocos son los emigrantes que han llevado a los hijos más pequeños o los que han tenido la capacidad económica para hacerlo. Los que ya se encuentran en edad de trabajar y están desde los 15 a los 27 representan algo más de la cuarta parte de los emigrantes. En este grupo se encuentran muchos estudiantes, los que salen a reencuentros familiares, los que emigran por trabajo, los que buscan una mejor calidad de vida, los que han contraído compromiso con una pareja (Barcenas-Alonso et al., 2022).

El grupo más numeroso es el que está compuesto por personas que tienen entre 28 y 65 años, siendo los que en gran parte han salido en busca de trabajo hacia otra partes dentro y fuera del país, manteniendo la tendencia de las emigraciones a nivel mundial, ya que son las personas entre estas edades las que están con toda la capacidad para producir y, por tanto, son demandados por los sectores productivos. Los dos emigrantes con 66 años o más son los adultos mayores que se han ido porque sus familiares se los han llevado a sus nuevos lugares de residencia a través de las redes migratorias. La tabla 5 muestra en porcentajes y cantidad de emigrantes adultos jóvenes que generalmente se mudan por trabajo hacia otras partes sean rurales, urbanas u otros países (Parada-Gutiérrez y Veloz-Cordero, 2021).

Tabla 5. Número y rangos de edad de emigrantes de los hogares rurales de la zona norte de la provincia  Los Ríos, Ecuador

Edad

Emigrantes internos y externos

Respecto al grupo de edad

Respecto al total

23 a 27 años ( Dentro del grupo de 15 a 27 años)

56

65,1%

17,5%

28 a 42 años (Dentro del grupo de 28 a 65 años)

163

71,2%

50,9%

Fuente: elaboración propia

Se puede apreciar que dentro del grupo de edad que va de 15 a 27 años, los que tienen edades entre 23 a 27 son el 65,1%, es decir, la mayoría, y con respecto al total de los emigrantes son el 17,5%. En el otro grupo que va desde los 28 a 65 años, los que están entre 28 y 42 años representan el 71,2% y con respecto a los 320 emigrantes, el 50,9%. Esto indica que los que tienen más de 42 años son los que han dejado de ser atractivos para el mercado laboral nacional e internacional y, por esa razón, son los que menos se encuentran como emigrantes. En total, los adultos jóvenes de 23 a 42 años (68,4%) forman parte del grupo que mayoritariamente ha salido. Coincidente con la teoría, los jóvenes son los que más emigran por su condición de fuerza laboral aprovechable para tareas en las que se utiliza la energía de la juventud, como la construcción u obreros de industria que se encuentran asentadas en las ciudades.

En el caso de la escolaridad (figura 5) de los emigrantes, se quiso saber quiénes son los que más han salido desde hace 10 años, si los de mayor o menor nivel de educación. Según la teoría, emigran los que tienen más oportunidades de trabajo, es decir, los de niveles de estudio más altos pero, en este caso, la mayoría solo ha terminado la secundaria, por lo que un gran número salió a trabajar y a continuar sus estudios, sobre todo los emigrantes internos (Ruíz-Muriel y Álvarez-Velasco, 2019; Nivela et al., 2024).

El grueso de emigrantes tenían un nivel de secundaria o educación media completa cuando salió, lo que representa el 47% de los 320 registrados. Para ir a trabajar en otro país o en la ciudad, los emigrantes deben tener algún nivel de escolaridad  para ser contratados. Es así que entre secundaria completa, carrera técnica y los que tienen nivel universitario, llegan a 70,5%, por tanto, los que menos emigran por las pocas posibilidades de obtener un trabajo con una remuneración que justifique su salida, son los de nivel primario. En el caso de los secundarios, no todos salieron por trabajo, algunos lo hicieron por estudio, sobre todo hacia las ciudades cercanas o de otras provincias.

Figura 5. Nivel de educación de los emigrantes de los hogares rurales de la zona norte de la provincia Los Ríos, Ecuador

 

 

 

 

 

Fuente: elaboración propia

Como se ha dicho, las personas emigran por varias razones, pero cuando lo hacen por trabajo y necesidad de conseguir mejores ingresos, generalmente tienen una familia que mantener; por esta razón, se puede constatar que la gran mayoría ya han contraído un compromiso con su pareja, ya sea casándose o en unión libre (figura 6).

Figura 6. Estado civil de los emigrantes de los hogares rurales de la zona norte de la provincia  Los Ríos, Ecuador

 

 

 

 

 

 

Fuente: elaboración propia

Los casados y unidos representan el 64,4% de los emigrantes, es decir, que casi las dos terceras partes han salido con una relación de pareja, mientras que el 29,5% ha salido en condición de solteros. Dentro de ellos, figuran los niños y adolescentes, aparte de adultos jóvenes que todavía no se han comprometido con ninguna pareja. Los que tienen otro estado civil como viudo/a, divorciado/a o separado/a han salido en menor proporción. Tal vez sus necesidades son menores a las de personas que están en una relación de pareja, o puede que no hayan tenido la ayuda suficiente para poder emigrar.

La mayoría de los emigrantes rurales de los hogares encuestados se encontraban laborando, pero al no estar contentos con su trabajo decidieron emigrar. Otros, el 32,2%, no tenían ninguna actividad económica remunerada antes de emigrar. Las dos terceras partes de los emigrantes trabajaban antes de salir de sus hogares. En este grupo se encuentran los adultos y jóvenes que desempeñaban alguna actividad económica, pero se vieron en la necesidad de emigrar por inconformidad en sus salarios o insatisfechos con la actividad laboral, mientras la otra tercera parte son los que han estado sin trabajo y salieron a buscar en las poblaciones aledañas, así como a Quito y Guayaquil, o se encontraban en edades escolares o de colegio y salieron con sus padres emigrantes.

Los que laboraban antes de emigrar fueron 218 de los 317, y estos se desenvolvían en las actividades que se muestran en la figura 7.

Figura 7. Actividad laboral antes de emigrar de los hogares rurales de la zona norte de la provincia  Los Ríos, Ecuador 

 

 

 

 

 

 

 

Fuente: elaboración propia

Los trabajos de los emigrantes eran en diferentes sectores, pero la mayoría en el agrícola, en el campo, como los jornaleros que son los asalariados en actividades agrícolas y cuenta propia, que son los que tienen en posesión pequeñas extensiones de tierra que les sirven para la subsistencia. Los ingresos que reportan estas actividades son bajos, lo cual es una de las razones para emigrar, sobre todo internamente. En este caso se encuentran el 49% de los emigrantes; sin embargo, no todos estos emigrantes que se dedicaban a la agricultura salieron por trabajo, además se les suman los estudiantes que viajaron hacia las ciudades.

Antes de emigrar, un grupo importante se desempeñaba en el sector privado como empleados. En la zona rural y urbana de Ecuador, la remuneración de este sector no es alta y, en algunos casos, no llegan a alcanzar niveles de salario básico decretado por el Gobierno, constituyendo un motivo para salir a buscar mejores ingresos en la ciudad o en otro país. Estas personas representan el 31,7% de los emigrantes, más los jornaleros (33,9%), ajustan el 65,6%; como característica común de todos es el bajo nivel de escolaridad pues los que se dedican a esta actividad en general no han terminado la secundaria o incluso la primaria, por lo que no tienen ingresos suficientes y salen a buscar mejores ingresos en los centros urbanos.

En un número reducido están los que laboraban en el sector público. Al ser los salarios superiores a los privados y los del jornal, se entiende que solo son el 9,6% de los emigrantes. Si se relaciona la actividad laboral que realizan las personas que viven en los hogares rurales que se revisaron con la que realizaban los emigrantes antes de salir, se tiene que actualmente son menos los empleados privados, pues el 18,8% se desempeña en esas actividades mientras que el 31,7%   labora en el sector privado, esto permite afirmar que actualmente son menos los trabajadores del sector privado que se convierten en emigrantes rurales, y también puede afirmarse que, por la salida de los emigrantes, las personas que se dedican a laborar como empleados privados han disminuido.

En el caso de los jornaleros, ha sucedido algo similar pues cuando salieron como emigrantes trabajaban en esta modalidad el 33,9% y los que actualmente están en esta condición en los hogares, son el 24,7%. Hay menos personas, proporcionalmente hablando, que se dedican a esta actividad, lo que indica que serán menos los jornaleros que emigren en el futuro. Además, se observa que esta actividad ya no es la principal como cuando emigraron, ya que, actualmente existen más individuos ocupados por cuenta propia (33,7%), que antes de salir (15,1%) y esto se puede atribuir a que en lugar de desempeñarse como jornaleros, se han dedicado a trabajar en sus propiedades  por ello se puede decir que, por un mejoramiento de su nivel de vida, han preferido permanecer en su hogar, en lugar de emigrar (Barbieri et al., 2020).

Conclusiones

La calidad de vida en el sector rural en Ecuador es de un nivel bastante bajo, con muchas necesidades materiales que luego acarrea problemas como la salud y educación, e incluso sociológicos al ser invisibilizado cuando se trata de participar en algún conglomerado social como su propia comunidad. Dentro de las carencias también están las inmateriales, como la autodignidad y sensación de tener altos niveles de satisfacción en la vida.

La emigración rural de la zona norte ha salido al interior por las facilidades de distancia, costo y capacidad económica.  Las edades para salir a buscar mejorías, tanto al exterior como internamente, está entre 30 y 40 años; estas personas tienen compromiso con su pareja y, mayoritariamente, han alcanzado nivel de escolaridad entre secundaria incompleta y completa, es decir, bachiller.

Referencias bibliográficas

Alarcón, H. M. B., Rodríguez, A. Z., & Puebla, M. F. V. (2019). La política pública migratoria ecuatoriana en el caso de la crisis migratoria venezolana. Revista Facultad de Jurisprudencia, (6), 121-137. https://www.redalyc.org/journal/6002/600263450012/600263450012.pdf

Barbieri, N. G., Ramírez Gallegos, J., Ospina Grajales, M. D. P., Cardoso Campos, B. P., & Polo Alvis, S. (2020). Respuestas de los países del pacífico suramericano ante la migración venezolana: estudio comparado de políticas migratorias en Colombia, Ecuador y Perú. Diálogo andino, (63), 219-233. http://dx.doi.org/10.4067/S0719-26812020000300219

Barcenas Alfonso, J., Martín Fernández, C., Peña Pino, I., & Robaina Figueroa, M. (2022). Los múltiples retornos: estudio psicosocial sobre la migración de retorno a Cuba. Revista Novedades en Población, 18(35), 1-21. http://scielo.sld.cu/pdf/rnp/v18n35/1817-4078-rnp-18-35-1.pdf

Camargo-Hernández, E. J. C., Montero, J. L. P., & Pardo, M. (2019). Creciente ola de migración venezolana en el territorio colombiano genera problemáticas socio-económicas en la actualidad. Revista Territorio y Desarrollo, 3(01), 27-36. https://revistaterritorioydesarrollo.com/index.php/ojs3/article/view/29

Cardoso-Ruiz, R. P. C., & Gives- Fernández, L. D. C. G. (2021). Migración ecuatoriana, género y retorno en el siglo XXI. CIENCIA ergo-sum, 28(2). https://doi.org/10.30878/ces.v28n2a5.

FAO (2023). Seguimiento del progreso en los indicadores de los ODS relacionados con la alimentación y la agricultura. https://openknowledge.fao.org/handle/20.500.14283/cc7088es

Freitez, A. (2019). Crisis humanitaria y migración forzada desde Venezuela. Crisis y migración de población venezolana. Entre la desprotección y la seguridad jurídica en Latinoamérica, 33-58.

INIEC (2022). Análisis preliminar CENSO 2022 con enfoque en Pueblos y Nacionalidades. 38 pp. https://www.secretariapueblosynacionalidades.gob.ec/wp-content/uploads/2023/12/Presentacion-CENSO-2022-Pueblos-y-Nacionalidades.pdf

Jiménez, A. J. B. (2020). Estudio Factores Macro, Meso y Micro de los inmigrantes ecuatorianos en New Jersey 2019: Inmigrantes Ecuatorianos en New Jersey. Sur Academia: Revista Académica-Investigativa de la Facultad Jurídica, Social y Administrativa, 7(13). https://revistas.unl.edu.ec/index.php/suracademia/article/view/674/1068

Martínez, L. (2004). La Nueva ruralidad en América Latina: Avances teóricos y evidencias empíricas. La emigración internacional en Quito, Guayaquil y Cuenca. Flacso, sede Ecuador. pp. 313-334. https://www.flacsoandes.edu.ec/sites/default/files/agora/files/1254927167.luciano_martinez_la_descentralizacion_0.pdf

Mata, D., Cunuhay, P. S., & Morán, R. P. (2021). Análisis económico del banano orgánico y convencional en la provincia Los Ríos, Ecuador. Avances, 23(4), 419-430. https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=8938888

Mendoza-CaVargas, E., Boza Valle, J., & Manjarrez Fuentes, N. (2021). Impacto socioeconómico de la producción y comercialización del cacao de los pequeños productores del cantón Quevedo: Socio-economic impact of the production and marketing of cocoa by small producers of the Quevedo canton. REVISTA CIENTÍFICA ECOCIENCIA, 8, 255-272.  https://doi.org/10.21855/ecociencia.80.603

Nivela, E. S., Avilés, E. M. C., & Mejía, N. D. L. Á. J. (2024). Impacto de la migración venezolana en el cantón Babahoyo en el año 2021. Dilemas contemporáneos: Educación, Política y Valores. https://doi.org/10.46377/dilemas.v11i2.4078  

Parada-Gutiérrez, O., & Veloz-Cordero, R. L. (2021). Análisis socioeconómico de productores de cacao, localidad Guabito, provincia Los Ríos, Ecuador. Ciencias Holguín, 27(1), 1-17. https://www.redalyc.org/journal/1815/181565709001/181565709001.pdf

Pérez, C. (2005). Muestreo estadístico. Conceptos y problemas resueltos. Madrid España: Editorial Pearson Prentice Hall. https://pdfcoffee.com/perez-lopez-cesar-muestreo-estadistico-conceptos-y-problemas-resueltospdf-4-pdf-free.html

Ramírez, J. (2020). De la ciudadanía suramericana al humanitarismo: el giro en la política y diplomacia migratoria ecuatoriana. Estudios Fronterizos, 21, e061. https://doi.org/10.21670/ref.2019061

Ramírez, J. (2021). ‘Un siglo de ausencias’: historia incompleta de la migración ecuatoriana. Mashkana, 12(2), 47-64. https://www.aacademica.org/jacques.ramirez/46

Ramírez, J., Linares, Y., & Useche, E. (2019). (Geo) políticas migratorias, inserción laboral y xenofobia: migrantes venezolanos en Ecuador. En Cécile Blouin, Después de la Llegada. Realidades de la migración venezolana. Lima (Perú): Themis-PUCP. https://www.aacademica.org/jacques.ramirez/22

Ramírez-Gallegos, J., & Umpierrez-de Reguero, S. U. (2019). Estado,(e) migración y voto: análisis longitudinal de la experiencia ecuatoriana (2006-2019). ODISEA. Revista de Estudios Migratorios, (6), 31-64. https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=7122075

Ruiz Muriel, M. C., & Álvarez Velasco, S. (2019). Excluir para proteger: la “guerra” contra la trata y el tráfico de migrantes y las nuevas lógicas de control migratorio en Ecuador. Estudios sociológicos, 37(111), 689-725. https://doi.org/10.24201/es.2019v37n111.1686 

Sotomayor-León, D., Barrios Miranda, A., & Chininin Macanchi, M. (2019). Consecuencias de la migración ecuatoriana. Universidad y Sociedad, 11(4), 458-464. http://rus.ucf.edu.cu/index.php/rus

Vázquez, A. (2005). Las nuevas fuerzas del desarrollo. Antoni Bosch Editor. España. https://www.ucipfg.com/Repositorio/MGTS/MGTS14/MGTSV-05/semana5/complementarios/TDES_Vazquez_Barquero_Unidad_3_1_.pdf

Velasco, S. Á., Cordero, B., Mezzadra, S., & Varela, A. (2019). Ecuador-México-Estados Unidos: La producción de una zona de tránsito entre políticas de control y la autonomía de la migración. In América Latina en movimiento. Migraciones, límites y sus desbordamientos (pp. 63-98). Universidad Autónoma de la Ciudad de México. https://traficantes.net/sites/default/files/pdfs/TS-ALMOVIMIENTO_web.pdf#page=64